Hedy Lamarr y el compositor George Antheil recibieron el número de patente 2.292.387 por su Sistema de comunicación secreta.[20] Esta versión temprana del salto en frecuencia, una técnica de modulación de señales en espectro expandido, usaba un par de tambores perforados y sincronizados (a modo de pianola) para cambiar entre 88 frecuencias, y se diseñó para construir torpedos teledirigidos por radio que no pudieran detectar los enemigos.