Marcela Serrano: El lenguaje

"Y el lenguaje: maldito y bendito a la vez, el  que nunca descansa, el que desenmascara todo, el que te sitúa en un espacio de mundo, el que te da identidad. También el que te hace mostrar la hilacha" .  ( Serrano, Marcela. Diez mujeres. Alfaguara 2001)

 Nueve mujeres, muy distintas entre sí y que nunca se han visto antes, se reúnen para compartir sus historias. Dan voz a sus conflictos delante de la décima protagonista, su terapeuta, que ha decidido reunirlas en la convicción de que las heridas empiezan a sanar en la medida en que se liberan de las cadenas del silencio.
No importa el origen ni la extracción social, la edad o la profesión, todas acarrean sobre sus hombros el peso del miedo, la soledad, las dudas, las inseguridades. A veces ante un pasado que no puede dejarse atrás; otras, ante un presente que no se parece a lo que habrían deseado, o un futuro que asusta por el vacío que encierra. Se enfrentan a cargas autoimpuestas o socialmente aceptadas, y no hay otro modo de deshacerse de ellas que tomando las riendas, conscientes de que al final vence el coraje y en esa lucha no están solas.

 

LO QUE ESTÁ EN MI CORAZÓN

En un permanente flujo y reflujo entre el presente y el pasado, Camila va narrando los motivos y viscicitudes de su presencia en San Cristobal de las Casas, Chiapas. Llega alli tomando la oportunidad de una oferta laboral que le hacen en su paìs de residencia, Estados Unidos, con la firma intenciòn de cerrar un desgarrador duelo por la muerte de su prorimogènito, apenas un bebé, y vovlver asi a la vida. En esa ciudad detenida en la historia, poco a poco va recuperando el alma perdida al calor de amigos que hace de la mano de su guía y anfitriona en la ciudad, Reina Barcelona, Antigua amiga y camarada de su madre, Dolores. Camila contrasta su vida con la de ellas admirando a estas dos mujeres por su valentia y arrojo, pero antes que nada por su sensibilidad ante los desvalidos, que les da un claro sentido en la vida. Es en ese grupo de amigos que surge una pulsion amorosa que la renueva. A punto ya de volver a Washington, Camila se ve involucrada en esa guerra velada de la que no se siente parte y a la cual ve de afuera, convirtiendo su estadía allí en una aventura.Habilmente entretejida en la trama, y como trasfondo de la naración, Marcela Serrano engarza su mirada sobre la mujer de estos tiempos, con sus contradicciones y ensueños, sobre el rol de la Iglesi Católica en la realidad presente de Chiapas, sobre la eterna lucha de los marginados por su liberación.